Canta el gallo

"¿Canta el gallo porque amanece o amanece porque canta el gallo?", reza el discurso de Llopis. "En verdad, no importa; es necesario un cambio de paradigma: dejar de lado la causalidad y atender la correlación." Es Llopis, R. una persona brillante, imprescindible, de discurso amable y certero, sabedora de la fuerza de su ciencia y su aplicabilidad... Ahora, ¿qué se entiende por correlación y qué por causalidad?, ¿qué se entiende por paradigma?, ¿y qué por cambio? ¿Qué puede hacer la matemática en el terreno de una inteligencia?¿Y qué es inteligencia?¿Es la capacidad de interpretar el entorno?¿Es la capacidad de transformarlo?¿Es el encuentro con lo otro?¿Qué relación guarda matemática con inteligencia?¿Cuál con la estructura del cerebro?¿Acaso es todo neurología?¿Acaso el pensamiento y los sentimientos pueden adoptar explicaciones en forma de quebrados e integrales? "Piensa el hombre porque tiene cerebro o tiene cerebro porque piensa..." podríamos cuestionar.
Si matemática es - etimológicamente - "cosas que se aprenden", estamos ante una interpretación desde el ente para con lo captable por el ente. De ahí, la idea, la equiparación del pensar con el idear, la creación de moldes, paradigmas. La inteligencia así se convierte en lo que se adapta al molde de la idea, e idea es lo que se aprehende y se utiliza, algo ya interpretado y cerrado. Por ello, herramienta. La herramienta para el artificio de una inteligencia es la matemática, artificio mensurable en términos de espacialidad y temporalidad. Lógica encerrada en un vallado formulable, artefacto que no se piensa a sí mismo, sino que responde a la inferencia desde la formulación que constituye su esencia. Matematismo y materia, máquina de secuenciación y paralelismo. Constructo humano, carente de vida; sistema entrenado, iterativo, mentira repetida millones de veces hasta parecer verdad. Ni siquiera un arte, sólo un ente, desconocedor del ser. Útil sí, inteligente no. Ahora, ¿está el pensamiento matemático aplicado a la IA acariciando una transformación? La pregunta es incorrecta porque encierra al pensamiento en la mathesis. "Pactemos con imperfección" (op. cit.), y aceptemos que lo útil y aparente es el camino, confundamos camino y verdad; soñemos que estamos en lo cierto y sigamos, extremo abandono del ser. Es necesario un diálogo fuerte y abierto entre Techné y Hermes, pavimentar el primer paso, hacer el camino, escuchar el lejano canto del gallo y pensar en otro amanecer.