Discursos de R. - El límite desvelado o cómo ganar dinero sin invertir

Dice R. verdades como puños pero son imposibles de demostrar porque se cuajan en los rincones de restaurantes y de bares de alterne.
Lástima de verbo tan acelerado. A R. nadie le entiende. Vibrante, empieza diciendo "mejor que NO se publique" para luego contar lo que nadie cuenta. Invita a las empresas de un sector a acercarse al límite, sabiendo que ya lo hacen, pero desde una atalaya donde se deja la hipocresía de lado y se muestra a las claras el interés de un sector por decir "estamos aquí; estas son nuestras reglas".
No es difícil entender que ni el foro era el adecuado ni el discurso podía entenderse sin una etapa de sensibilización previa. El límite de R. es el desvelar la máscara que hoy oculta a los que tejen relaciones y pactan acuerdos que benefician solo a ellos. R. quiere que lo oculto se muestre y es generoso: "porque competencia multa es evidente que algunos pactan... ¿por qué no ser como ellos?" Polémico, llama a incrementar la rentabilidad de nuestras empresas sin incurrir en innovaciones...
Pero nuestro negocio no está para estos aires. Deberían ser cuatro o cinco grandes empresas y estamos muy atomizados. Ahora, ¿es un planteamiento moral? No, para mis principios. ¿Es ético? Sí, desde la visión capitalista protestante. ¿Es legal? No, seguramente no, y nunca debería serlo. No debe consentirse - desde el poder judicial y mientras quede un ápice de democracia en un gobierno representativo que legisle por el bien común -, no debe consentirse que el capital tome también las riendas de lo conveniente para sí mismo como conveniente para todos. Y, la verdad, estamos a un paso de ello.

A R., con cariño, no dejes de polemizar; siempre queda algo.

Comentarios

Entradas populares